martes, 4 de junio de 2019

Ella

Ella
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Es triste y lejana como la corteza
de un árbol maduro que quiere morir;
es rota campana que se despereza
por dar a sus ecos su propio latir.
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No ambiciona nada, vive en la certeza
de un tiempo ya ido que soñó vivir;
errabunda y sola, su naturaleza 
es como la lluvia con su devenir.
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Siempre fue la santa sin ningún santuario,
dedicada y noble, justa por demás,
que ignoró la fuerza de sus emociones.
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Darlo siempre todo fue su corolario,
nunca suele el tiempo dar la vuelta atrás...
Se inmoló a la sombra de las estaciones.
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Mardy Mesén R
08/05/2018
San José, Costa Rica.


Pintura: “Pensando en su hijo” (Maeso).

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