RENDIDA ANTE SU PIEL
¿Una trampa me tejes, Primavera,
que el viento, el sol, la brisa me estremecen?;
rendida ante su piel, desaparecen
los miedos y me siento traicionera.
Me ha invitado a la fiesta de su hoguera
y, en sus ojos de ensueño, languidecen
mis votos de lealtad; mis ansias crecen
como si el mismo infierno las prendiera.
Mis alas tienen dueño, mi ser llora,
y tú, clavel de sangre y de pasión,
príncipe, fauno, duende que enamora,
vas a morder mi torpe corazón.
Yo, que fui ninfa blanca y soy señora,
te cedo mi alma y cuerpo…, mi razón.
Mardy Mesén R.
San José, Costa Rica.
Derechos Reservados
•Copyright ©
Yo, que fui ninfa blanca y soy señora,
te cedo mi alma y cuerpo…, mi razón.
Mardy Mesén R.
San José, Costa Rica.
Derechos Reservados
•Copyright ©
No hay comentarios:
Publicar un comentario